Hoy en día son cada vez más los que
optan por eliminar el gluten de su dieta, ya sea por intolerancia o por una
elección de estilo de vida. Mi idea no es ensalzar ni demonizar al gluten, ya
basta con la guerra “virtual” al respecto, creo que cada uno debe alimentarse
según sus gustos y necesidades, aprendiendo a escuchar a su cuerpo. Más allá de
eso, les propongo hacer un pan de trigo sarraceno, apto celíacos y enemigos del
gluten. A los que no saben muy bien qué es el trigo el sarraceno les cuento que
es un “pseudo cereal”, si bien se le llama “trigo” no pertenece a la familia de
las gramíneas y no contiene gluten. Es muy rico en proteínas, fibra, minerales
y vitaminas del grupo B principalmente. Se consigue en grano (para consumir
como arroz, cebada o trigo candeal, o para germinar) o en forma de harina,
ideal para preparaciones aptas para celíacos.
Ahora que ya está presentado,
procedo a utilizarlo…
Este pan es muy simple, súper
saludable y más que fácil, ni siquiera se amasa!
Ponemos en el bowl 500 grs de harina
de trigo sarraceno, ½ cda. de sal y mezclamos, en el centro agregamos 30 grs de
levadura fresca, 1 cda. sopera de miel de caña o azúcar de mascabo, 1 cda. de aceite de oliva o de
coco y 450 cc de agua tibia. Mezclamos con cuchara de madera, tiene que quedar
una “pasta” cremosa, similar a la mezcla de un budín. La tapamos y la dejamos
en un lugar cálido por unas 3 horas, o hasta que veamos que creció y se
formaron alvéolos (como agujeritos en la masa). Lo volcamos en un molde
enaceitado, y lo dejamos levar 1 hora más. Lo cocinamos en horno medio por 45 a
50 minutos, hasta que al clavar un palillo éste salga limpio. El resultado es
un pan muy húmedo, de sabor intenso. A esta receta básica se le pueden agregar
semillas de cualquier tipo. Recomiendo guardarlo en heladera para que no se
reseque.
No hay comentarios:
Publicar un comentario