martes, 15 de julio de 2014

Pastel de cordero especiado con frutas secas


Este plato es ideal para los que le tienen un poco de miedo a los sabores de carnes diferentes (o sea, a salir del pollo, la vaca y el cerdo). El gusto intenso del cordero se suaviza al conjugarse con el resto de los ingredientes y el resultado es un pastel súper aromático y delicado.

Si realmente no se animan a usar cordero, pueden hacerlo con otro tipo de carne, pero van a perder la esencia de este manjar.

Para empezar rehogué dos cebollas picadas con un poco de aceite de oliva, agregué 500 grs de carne de cordero  cortado en trocitos chicos, condimenté con sal, pimienta de Jamaica, canela, comino, clavo y dos cdas. de azúcar negro. Bajé el fuego a mínimo y dejé cocinar por 30 a 40 minutos, o hasta que la carne estuvo tierna (va a depender de la parte del cordero que hayan usado, la paleta tarda más que la pata). Al final incorporé nueces, castañas de cajú y pasas hidratas en cognac (la cantidad es a tu gusto).

Mientras cociné un zapallo kabutia al horno, le saqué la pulpa y la condimenté con sal, pimienta y nuez moscada.

En una fuente de horno armé el pastel colocando un poco de puré de zapallo en la base, el relleno de cordero y terminando con el resto del puré. Cubrí con fruta seca picada y llevé al horno por unos 25 minutos.


 

También se pueden usar restos de carne ya cocida, teniendo en cuenta que la cocción del relleno será solo de unos 10 minutos, como para amalgamar texturas y sabores.