Alguna vez
ya les conté acerca de las propiedades beneficiosas de las semillas y sus
diversos usos culinarios. Hoy decidí combinarlas con otro ingrediente súper
saludable, el azúcar de Mascabo. Es un tipo de azúcar de caña sin refinar que, además de ser sano, tiene un sabor
exquisito y un color dorado muy atractivo. El resultado fue una garrapiñada
crocantísima, ideal para picotear como snack, mezclar con yogur o espolvorear
sobre algún postre. Esta receta también se puede hacer con azúcar común, pero
el sabor no es el mismo, y perdemos bastantes nutrientes al usar un producto
refinado.
Las
cantidades son muy fáciles de recordar, misma cantidad de semillas, que de
azúcar, que de agua. Ponés todo en un recipiente y lo llevás al fuego. Hay que
mezclar constantemente con cuchara de madera. Al principio te va a parecer que
el líquido no se evapora más, pero después de un rato (unos 10 a 15 minutos),
el agua desaparece y se empieza a acaramelar la preparación, hasta formarse una
especie de “bodoque”. Tenés que seguir mezclando hasta que el “bodoque” se
seque y el caramelo pierda su brillo. Ahí la preparación va a estar lista. La
retirás y la ponés sobre un mármol. Dejás enfriar y listo!. Guardala en frascos
herméticos para que se mantenga crocante.
Las hice rrcirn y salueton quemadas,que tan fuerte tiene qur estar el fuego para que salgan bien?
ResponderEliminarHola! Hacelo a fuego medio por las dudas...y nunca dejes de mezclar!
ResponderEliminarMalísima receta! Tres veces quedo feo y con gusto a quemado. Mi pareja después de verme renegar me dio la posta. Un poquito de aceite de coco, la azúcar y semillas. Y mezclar todo el tiempo en un toque están!!
ResponderEliminareso es porque no sabes cocinar
EliminarMalisima reseta! Lo mismo que los demas. Salio quemada
ResponderEliminaryo lo hago sin agua y salen perfectas
ResponderEliminarBuenas...intenté esta receta, pero quedaron muy pegados ( no tan quemados). Los hice de la siguiente manera y quedaron como los que compras...
ResponderEliminarPrimero cakebte bien la sartén. Luego coloqué las semillas de girasol para que estén calientes (solo calentar no tostar) y no hagan ese bodoque por el cambio de temperatura. Luego fuera del fuego coloque un poco de mascando y revolvi con fuerza. Luego nuevamente al fuego muy poco. Y fuera del fuego mascabo y revolver. El secreto es revolver siempre e ir sacando y poniendo en fuego pero Siempre poco tiempo .
Espero haber ayudado.
Saludos.
Quedaron geniales!!!! Calenté las semillas en la satén (semillas previamente activadas y escurridas) luego agregué el azúcar mascabo y finalmente el agua. Todo a fuego muy bajo hasta romper hervor, esperé que se evapore el agua mientras revolvía y sacaba o ponía al fuego hasta lograr el punto justo. Quedaron riquísimas!!!!!
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